La emblemática casa de comidas típicas celebra una década y media ofreciendo los mejores platos y vinos de Salta
“El local de Ruta 20 fue el primero en inaugurarse: El 7 de agosto de 2004”, cuenta Gustavo Villalpando el creador del resto que lleva su apellido. “Nació con una capacidad de 20 cubiertos. Hoy tenemos 140”, agrega Gustavo.
La excelente respuesta a la propuesta del local de Fuerza Aérea llevó al emprendedor a abrir un nuevo local en 2010 y la ubicación elegida fue nuestro barrio, General Paz.
“La elección fue por el auge que tenía la gastronomía en ese momento por el barrio y porque nos gustó el estilo del local que era rústico”, asegura el comerciante.
Además, la casona donde vive Lo del Villalpando no solo se destaca por su pintoresco aspecto antiguo sino por una inmejorable ubicación: calle 25 de mayo, a metros de Pringles. Es una de las esquinas centrales de la zona.
Una carta imperdible
Lo de Villalpando se destaca por una propuesta de comidas típicas argentinas y particularmente de la provincia de Salta, de donde es oriundo su dueño. Una de las especialidades de la casa es el locro, pulsudo y abundante, para disfrutar no solo en fechas especiales sino todo el año. También hay cabrito y lechón, hechos al horno.
A esos se agrega, creativas y tentadoras creaciones propias como el poderoso “choripando”, con pan casero, chorizo de cerdo, mayonesa saborizada, apio y ajo; el generoso “sanguchancho”, una tremenda feta de bondiola de cerdo horneada con hierbas y especias; y una extraordinaria picada que trae cazuelas de revuelto ‘e mote, primavera de Quínoa, locro, riñoncitos al torrontés y buseca.
Y por supuesto, las famosas “Empanadas salteñas de la abuela Ema”, en sus variedades de carne picada a cuchillo, mondongo, pollo y queso de cabra.
Para todo público
El salón de 25 de mayo es cálido y cómodo, para 90 cubiertos, visitado tanto por parejas como familias y grupos de amigos.
“También es muy frecuente tener encuentros corporativos, por las empresas de la zona que organizan sus comidas en nuestro local”, agrega Gustavo.
Una experiencia gratificante
“El negocio para mí ha sido una increíble experiencia de resiliencia, luego de una crisis personal y laboral, poder haber logrado crear una oportunidad de trabajo para mí y para muchas familias es una gran alegría”, señala Gustavo.
Lo de Villalpando es un emprendimiento con el sello de la gastronomía nacional y con el corazón de la cultura salteña. Hoy cumple 15 años como empresa y va por los diez en General Paz. ¡Felicidades y a brindar con un buen vino!
