Nahuel Agustín Sampo es un joven de 20 años, vecino de calle Buchardo y egresado del Saavedra de barrio Juniors, referente en Argentina de una singular disciplina que consiste en crear música solo con la boca.

Él cuenta con dos talentos muy particulares: Es un habilidoso mago – de ahí su apodo artístico “Wizard” (hechicero, en inglés) – y un creativo del beatbox, una práctica en la que básicamente, se hace música sin instrumentos, solo con la boca.

Nahuel arrancó muy joven en ambas disciplinas, haciendo sus primeras experiencias informales en su colegio, el Saavedra de barrio Juniors, mientras que hoy lo hace en bares, boliches y eventos.

En marzo de 2018, viajará a Alemania para ser parte del Mundial de Beatbox, que se realiza cada cuatro años con los mejores exponentes del planeta en esta actividad.

¿Cómo descubriste el beatbox?
Tenía un amigo que hacía esto, me llamó la atención y lo busqué en Youtube. Cuando no sabés del tema, buscás en Internet al más conocido y así descubrí a los más grossos.

¿Y cómo arrancaste a practicarlo?
A los 13 años, jugando más que nada. Caminaba y practicaba probando sonidos nuevos… A los 15 me di cuenta que me salía bien y que me gustaba mucho. Entonces empecé a pensar en dedicarle más tiempo. Aparte, en el colegio los profesores sabían y me proponían hacerlo en los actos. En los recreos poníamos música y yo hacía algo de beatbox en el medio.

Sí fue magia

Esas experiencias del cole sirvieron para quitar el miedo escénico, los nervios por tener público
Sí, seguro… Pero ese miedo lo fui perdiendo antes. A los 13 empecé un curso de magia y lo terminé a los 16, como uno de los magos más jóvenes de Córdoba. Por eso el apodo “Wizard” (Hechicero). Ya con eso perdí el pánico escénico.

¿Hacés presentaciones?
Sí, generalmente me convocan para fiestas de 15 años, casamientos… Hago una apertura con show de cartas y más entrada la noche hago beatbox… Un combo, dos por uno (risas). Con beatbox hago más presentaciones en boliches, bares, apertura de bandas, de Dee Jays… Suelen llamarme para eso. Lo bueno es que mucha gente no conoce aún esta práctica y le resulta novedoso.

Otra forma de hacer música

¿Se puede decir que lo tuyo es como componer?
Exacto, es como crear música. Y lo bueno que tiene es que no necesitás nada más que tu boca para hacerlo. Vas caminando y practicando sonidos nuevos y así vas haciendo temas.

¿No llegás a un límite donde no hay nada más para inventar? Porque tampoco puede haber tantas variantes al ser la boca tu único instrumento.
No, límites no tiene. Siempre te puede ocurrir algo nuevo, un sonido, un drop y una pausa distinta. Y a nivel mundial siempre surge un referente nuevo que mejora al anterior y genera ideas superadoras.

Berlín siempre estuvo cerca

¿En Beatbox se compite?
Sí, al estilo del rap, en intervenciones de un minuto y medio de uno contra uno. El fin de semana pasado hubo una competencia en Casa Babylon y ahí estuve de jurado.

Ya no sos participante, directamente jurado (risas) ¿Cómo se determina quién gana?
Sí, hace un tiempo (risas). Se evalúa la técnica, la originalidad, creatividad… También cómo el participante va levantando al público… Y con esos criterios se define el ganador.

Contanos del certamen de Alemania
Es el Mundial. La competencia es en Berlín y se hace cada cuatro años. El próximo es en marzo del año que viene. Ahí están los mejores del mundo y voy a presentarme a ver si puedo clasificar.

¿Cómo es la modalidad, en qué consiste?
Participantes del certamen son entre 30 y 40, pero los que nos presentamos como aspirantes somos más de cien. Al llegar allá te inscribís, hacés una presentación de un minuto y un jurado evalúa si estás en condiciones de competir o no en la fase definitoria. A partir de ahí es eliminatorio, uno contra uno hasta llegar a octavos de final, cuartos, etc.

El sueño alemán

¿Cómo te vas preparando a medida que se acerca la fecha?
Más que todo voy a adquirir experiencia, a conocer. Va a ser increíble estar ahí viendo a los mejores, con participantes de todas partes del mundo… Hay confianza, buena onda.

¿Tenés amigos de otros países que hacen esto?
Sí, tengo un grupo de whatsapp con los chicos de España y hay muy buena onda con los europeos en general.

¿Cuáles son tus sueños o expectativas con el beatbox?
Sinceramente yo comencé como un hobbie pero hoy mi sueño sería radicarme allá (en Europa) y dedicarme de lleno como trabajo. En España, Francia, Estados Unidos y otros países, quienes hacen beatbox viven de esto. Eso sería espectacular.

Nahuel Agustín Sampo, o “Wizard”, es un pibe de nuestro barrio con talento y sueños que quiere dar el gran salto en esta particular actividad que lo tiene como uno de los referentes en Córdoba y el país. Pidió doble turno en el local Rocka Bruja de San Vicente, donde trabaja, para reunir los fondos para viajar. Está abierto a recibir esponsorización y anunciantes que quieran acompañar el sueño de estar en el Mundial de Alemania. Seguramente así será y ojalá sea una gran experiencia.

Más info: Podés ver y escuchar lo que hace Nahuel en su canal de Youtube, Wizard Beatbox.