Es vecina de barrio Juniors y parte de la nueva camada de jóvenes periodistas cordobeses que viene pidiendo pista en los medios de comunicación. En el marco del día de la mujer, y sin declararse feminista, reconoció que hay avances en la igualdad de oportunidades según el género aunque aseguró que falta otorgar mucho más lugar a las mujeres en ámbitos como la política, el periodismo y los espacios de decisión.

En Córdoba, tras décadas de ver las mismas caras en la televisión y escuchar las mismas voces en las radios, en los últimos años encontramos una generación de periodistas jóvenes que ha comenzado a ganar terreno en los distintos medios de comunicación.

En esa camada está Carolina Biedermann (30), productora general de contenidos en Canal C, medio local dedicado fundamentalmente a programas de noticias, política, economía y actualidad, entre otros temas.

Egresada del Colegio Universitario de Periodismo, donde trabajó seis años en el área de comunicación digital, Carolina es vecina de las torres de barrio Juniors, lugar que la hace muy feliz, según lo que nos cuenta.

Toda su vida pasa por nuestros barrios, teniendo presente que la sede del canal está en Pueyrredón. Allí fuimos a visitarla para dialogar con ella, entre otros temas, sobre la realidad de la mujer de hoy, en vísperas de un nuevo 8M.

Contanos cuál es tu rol en el canal
Estoy a cargo de la producción general de Canal C y además de la realización de Jaque a la noticia, un programa de información y actualidad. Ahí además estoy como co-conductora en el panel… el año pasado y desde 2015 hacíamos 20 en 20, 20 noticias en veinte minutos, que iba a la noche.
Este trabajo es de lunes a lunes a cualquier hora… tenemos en el canal más de 45 producciones, algunas propias, otras independientes.

Has hecho noticias, política, espectáculos…. ¿Dónde te sentís más a gusto?
Mi pasión es el periodismo político, me especialicé en eso, es lo que estudié… También han surgido oportunidades en otros contextos… es una carrera donde se abren otras vetas.

¿Cuáles han sido tus últimas experiencias además de Canal C?
El verano pasado tomé un trabajo con el canal Ciudad Magazine, que es nacional, en temporada de espectáculos en Carlos Paz… No es mi área, pero traté de darle un costado más periodístico a la información, no bajarlo al chimenterío y las polémicas sino con datos sobre ocupación hotelera, economía del turismo, vincular lo teatral a lo cultural y no tanto al chimento.

¿Era lo que quería el canal? ¿Cómo se compatibiliza lo que a uno le gusta con lo que te piden?
Yo tenía tres salidas: En una le daba mi impronta, en otra sí tenía que traer un invitado al piso, vinculado al tema del momento. Uno va equilibrando porque si no no trabajás. Por un lado está el trabajo y por otro la satisfacción personal. Ojo, uno también puede decir que no.

¿Qué trabajo rechazarías? ¿Qué no harías en los medios?
Me pasó en cuestiones de espectáculos. Me pedían hacer un móvil con una bajada algo ridícula… y bueno, hay cosas a las que no me presto ¿Cómo salgo en el próximo lugar donde trabaje a dar una noticia formal después haber hecho una payasada en otro canal?

Es una construcción de perfil
Claro, vos vas construyendo tu imagen y siempre está ese límite de saber hasta donde uno cede por trabajo. Hay diferentes situaciones. Igual, nunca le tuve miedo a que me digan “no continuás”. No se me caen los anillos por trabajar de otra cosa, he trabajado de otras cosas por fuera del medio.

Mujeres al frente

En el marco de una nueva conmemoración del día de la mujer, el 8 de marzo, charlamos con Carolina acerca de la ola feminista de la actualidad y los distintos alcances de los movimientos que reivindican los derechos de la mujer.

¿Cómo ves el movimiento de mujeres de los últimos años?
Hay muchas aristas. Me parece que es muy bueno darle visibilidad al trabajo de la mujer. Hay ambientes donde hay mucho machismo, como pasa en la política o en el periodismo, donde la mayoría son hombres. La mujer no está para dar el clima o los espectáculos. La mujer también puede hablar de los temas llamados serios, como política o economía.

¿Qué lugar tiene la mujer en los medios de Córdoba?
En los noticieros hemos visto que generalmente hay un hombre y una mujer. Eso se ha dado; pero siempre el que habla de deportes es un hombre y la que habla de espectáculos es una mujer; son roles que se han asimilado a los géneros y sería importante plantear que una mujer también puede hacer una entrevista de política o deportes y el hombre también puede presentar la nota de espectáculos. Hay que reflotar y revalorizar el rol de la mujer y realmente empezar a darle espacio porque no se da dentro de los medios.

No tienen las mismas oportunidades o posibilidades de acceso, digamos
Las mujeres tienen que hacer mucho más mérito que un hombre y prepararse mucho más para llegar a una misma función o cargo determinado.
Dentro de los medios hay machismo… Son cuestiones sociales en las que de a poco se va avanzando para ganar nuevos espacios.

¿Cómo ves las leyes de cupo femenino, que establecen que debe haber paridad en la representación política?
Es por un lado muy bueno que haya una ley de cupo en la política. Pero, por otra parte, me pregunto ¿Es necesario que hayamos tenido que llegar a proyectos de ley para establecer cupo cuando es algo que debería ser natural la participación igualitaria de hombres y mujeres?
A mí me ha tocado mucho cubrir eventos empresariales y en las direcciones de las empresas son todos hombres…  son contadas con los dedos de una mano las mujeres que participamos de esos eventos. La mujer debe poder estudiar,  trabajar, acceder a cargos, y que al momento de asignarle a a alguien una función laboral o al momento de cobrar un sueldo sea por capacidad y no por una cuestión de género.

“La igualdad de oportunidades laborales entre hombres y mujeres debe ser una lucha de toda la sociedad, sin dividirnos entre machistas y feministas”

¿Pañuelo verde o celeste?

Otra de las demandas del colectivo de mujeres que se viene expresando en la calle, en las redes sociales y en otros espacios es la despenalización del aborto.

¿En este tema cuál es tu opinión?
Yo creo en la libertad de decisión de las personas pero pienso que como sociedad deberíamos prepararnos más. Con respecto al proyecto puntual de despenalización que se presentó el año pasado, creo que le faltaba mucho debate, mucho trabajo. Había puntos que no estaban claros. Sirvió para sacar a luz un tema vigente en la sociedad y es bueno que se empiece a debatir pero, así como estaba, al proyecto le faltaba mucho trabajo más.

¿No tenés una postura definida hacia una u otra posición?
No pasa por estar a favor o estar en contra. Creo en la libertad de las personas pero creo que, en el contexto en el que se elaboró, el proyecto que se presentó no estaba desarrollado con la madurez necesaria como para que sea aprobado.

¿Y si tuviera esa madurez y desarrollo el proyecto?
En los casos de violación ya está contemplado. Ahí sí lo aceptaría.

¿Y sacando los casos de violación?
No. Creo que como sociedad no estamos preparados. Nos falta madurar mucho en el tema.

“Al proyecto de despenalización del aborto del año pasado le faltaba mucho trabajo y desarrollo. Para aprobarse, aún nos falta madurar mucho como sociedad”

Las denuncias de acoso

Hay un fervor en el grito de las mujeres que buscan la reivindicación de sus derechos que otras mujeres  y  hombres consideran que se ha pasado de rosca, que está exacerbado… ¿Cuál es tu mirada de este fenómeno?
Creo que hay diferentes grupos. Dentro mismo del feminismo hay distintas posturas e incluso contradicciones. A mí personalmente me cuesta encasillarme en algún grupo puntual. Yo me paro en la búsqueda de igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres, en lo laboral particularmente. Y en esa lucha debemos estar tanto hombres como mujeres sin dividirnos entre machistas y feministas. Debe ser una lucha social de todos.

Con respecto a la ola de denuncias de acoso de los últimos tiempos, ¿cuál es tu mirada?
Creo que, hasta hace pocos años, una mujer que denunciaba era separada de su cargo, estigmatizada o ignorada. Esta ola de denuncias abrió la discusión sobre temas que estaba prohibido tocar y de pronto muchas mujeres se animaron a hablar.
Pero creo que es la justicia la que finalmente debe determinar una condena; no estoy a favor de los escraches públicos sin pruebas y sin pasar por un proceso judicial.

En redes sociales, por ejemplo.
En redes pasó lo del chico de Bariloche, que fue escrachado y se terminó suicidando.
Es peor el estigma social que la determinación que pueda dar la justicia.

¿Qué papel tuvieron los casos de figuras públicas que salieron a denunciar?
Gracias a las figuras que sacaron sus casos a la luz se generaron un montón de denuncias de acoso de todo tipo: sexual, infantil, laboral…. Muchas mujeres que estaban en silencio se animaron a hablar y están realizando el proceso judicial. Es necesario que se denuncie, que se conozca y que haya información sobre estos temas.

Año electoral

De acuerdo a lo que nos contaste, te interesa mucho la política ¿Qué es lo que ves en este plano a nivel local y provincial?
Lo que me parece positivo es que desde unos años a esta parte se ha vuelto a hablar de política y a participar activamente. Y también hay más información: la gente busca saber más sobre lo que pasa y sobre los candidatos.

Hablemos de los candidatos entonces:

Ramón Mestre: Creo que haberse postulado para la interna a gobernador, aun en contra de lo que quería el macrismo a nivel nacional, fue un gesto de valentía.

Mario Negri: Es uno de los hombres de las costillas de la Nación, muy vinculado al gobierno de Cambiemos.

Juan Schiaretti: Me parece que a nivel de obras, su trabajo ha sido muy grande. Y también le dio a la provincia un nivel de gestión y diálogo con la Nación que con el kirchnerismo no se había tenido. Y el diálogo con el municipio también mejoró.

Martín Llaryora: Me parece un hombre de la renovación del peronismo. De la nueva camada de intendentes jóvenes que se muestra un líder de la renovación.
¿Lo ves como intendente de Córdoba?
Lo que hizo en San Francisco fue muy grande, entonces también podría ser bueno para la ciudad de Córdoba.

Elisa Carrió: Es denunciante, una mujer más propia del poder legislativo. Creo que funciona muy bien ahí, no sé si la veo para el ejecutivo. De todos modos, cuando tuvo que pararse frente al gobierno nacional, del que ella misma forma parte, lo ha hecho también con valentía.

Mauricio Macri: (risas) Es el hombre que se llevó las esperanzas de los argentinos. Había generado muchas expectativas, sobre todo en Córdoba. Lamentablemente, los resultados no favorecieron en lo económico, que era donde más apuntábamos a crecer. Y sin duda, Córdoba fue el distrito que más lo apoyó. Lamento el resultado porque uno quiere que al país le vaya bien.

Cristina Fernández de Kirchner: Es una gran dirigente pero no comulgo con ella. Las investigaciones judiciales decepcionan mucho por la impunidad con la que se usaron los recursos del estado para beneficiar al poder.

Y ahora estás formando una familia con un político o futuro político (Martín Giesenow, presidente del centro vecinal de Juniors).
Sí (risas). Pero tratamos de no mezclar y respetar los espacios de cada uno porque los valores y las ideas no se venden. La forma de generar una carrera periodística sólida es tratando de ser lo más objetiva posible.

Serás consciente de que en el futuro te van a chicanear con el argumento de “tu marido es peronista por eso vas a opinar a favor del PJ”…
No, no lo hago de hecho. Ningún color político es perfecto pero yo no voy a salir ni a hablar bien de uno o matar a otro porque no me caso con ninguno porque mi trabajo se basa en la objetividad. Cuando hay temas en lo que está involucrado a la actividad de Martín, no lo cubro. Jamás le haría una nota, creo que no sería ético. Y la ética es lo primero en esta carrera.

El futuro

¿Donde te ves de acá a cinco o diez años? ¿Noticiero, redes, Buenos Aires tal vez?
Yo elegí Córdoba. De hecho tuve posibilidades de ir a Buenos Aires a trabajar y estudiar pero me gusta Córdoba, nací y crecí acá… y quedarme me permite tener un equilibrio entre carrera y familia, las dos cosas son muy importantes para mí.

¿Y con qué actividad?
Me veo generando algún tipo de proyecto propio. Es bueno equilibrar la relación de dependencia con la posibilidad de emprender porque te da libertad y genera nuevos desafíos.

¿Será algo como influencer en redes sociales? Dado que los medios tradicionales vienen perdiendo espacio frente a estos nuevos canales.
Proyectos digitales sí pero no me veo como influencer. Cuando estaba estudiando la carrera aparecieron Facebook y Twitter… fue el momento en el que explotó todo y arranqué con esa ola. Hoy lo veo más como una herramienta. No creo que haya desaparición de los medios tradicionales sino un trabajo complementario.

¿Cómo es tu actividad en las redes?
Ahora la he bajado un poco. Me encanta hacer resúmenes informativos por Instagram… Facebook lo dejé de usar, me aburre. Lo uso cuando quiero llegar a un público de más de 40 años, si no uso historias de Instagram para informar pero no para ser influencer sino para dar un servicio a mis seguidores.

La maternidad

Dejanos la reflexión que quieras sobre el hecho de ser mamá, que es lo que estás viviendo ahora
Te cambia la vida completamente ya desde que el bebé está en la panza. Por eso cuando vos me preguntabas sobre la despenalización del aborto, la experiencia de maternidad te cambia también la percepción y la perspectiva. Creo que la vida de cada mujer es distinta por eso nunca juzgaría a alguien que piense o actúe distinto. Es el grave problema que hay en Argentina, todos buscan confrontar, imponer su idea y falta mucho diálogo.

Como para muchas mujeres, el desafío será pilotear profesión y familia
Mi objetivo es poder complementar las dos cosas: ser madre y profesional. Para poder también enseñarle eso a mi nena (Juana) y compartir las tareas con mi pareja, en un marco de igualdad y acompañamiento…

Van a cambiar los pañales los dos, hacer las compras los dos…
¡Por supuesto! Igualdad en todo (risas) División de tareas, para promover eso en nuestra familia y que nuestra hija lo aprenda desde chica.

El barrio 

Luego de años de vivir en el centro, Carolina destaca cómo cambió su vida al mudarse a las torres de Juniors, en Arenales y La Plata. “Tenés seguridad, comercios, la gente es súper agradable, hay un ambiente muy familiar… Realmente es un espacio ideal para criar un niño”, describe la periodista, una vecina que no oculta su felicidad por la maternidad, su pasión por su profesión y sus sueños de crecer.